La Secretaría del Bienestar pagó más de 48 millones de pesos en pensiones a 13 mil 366 personas fallecidas, revela el informe de la Cuenta Pública 2021 que presentó este lunes la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
De ese monto, 18 millones de pesos corresponden a pagos realizados a 3 mil 260 derechohabientes que habían fallecido antes del ejercicio 2021.
En contraste, se pagaron 3 millones 229 mil pesos por concepto de “pago de marcha” a 2 mil 385 personas que habían reportado que sus parientes habían fallecido, pero seguían vivos.
Según las reglas de operación de la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y la Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, los deudos de un derechohabiente fallecido tienen derecho a un Pago de Marcha.
La ASF también detectó un quebranto económico por 30 millones de pesos, por pagos a 10 mil 106 personas, quienes -de acuerdo con la información proporcionada por el Registro Nacional de Población e Identidad- recibieron apoyos después de la fecha de su defunción ocurrida entre enero y agosto del 2021.
En ambos casos, el órgano de fiscalización advirtió que la causa de la irregularidad es la falta de mecanismos de control para realizar la conciliación de las CURP con el Registro Nacional de Población e Identidad.
Adicionalmente, la ASF detectó un probable daño a la Hacienda Pública por 5.6 millones de pesos por pagos a 347 personas, cuyos nombres no coinciden con las registradas en el padrón de derechohabientes de pensiones.
También se descubrió el pago de 2 millones de pesos a 125 personas que cobraban pensión sin haber cumplido los 65 años que establecen las reglas de operación.
Finalmente, la ASF informó que encontró un desvío de poco más de un millón de pesos por concepto de pagos duplicados a 279 personas adultas mayores derechohabientes del programa de pensiones para el Bienestar, que contaban con dos números de identificación.