image

Adiós a las becas del Conahcyt en el extranjero

De acuerdo con los propios datos de Conahcyt en 2023 hay 67% menos becarios de doctorado en el extranjero que en 2018

¿Hay más o menos becas del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) para que los mexicanos puedan estudiar en el extranjero? De acuerdo con los datos del propio gobierno, no hay lugar a dudas: hoy hay 67% menos becarios que en 2018. Sin embargo, en la ahora permanente invención de “otros datos” y la negación de la realidad, la titular del Conahcyt, María Elena Álvarez-Buylla se ha lanzado a descalificar a cualquiera que señale lo que la propia información del gobierno demuestra. Los datos oficiales prueban sin lugar a dudas que las becas Conahcyt para estudiar en el extranjero están en proceso de extinción. 

Descalificar sin responder

Ante la afirmación del periodista Ricardo Raphael de que el Conahcyt había eliminado becas de posgrado en el extranjero, la institución dirigida por Ávarez-Buylla emitió el comunicado 432, en el que además de señalar que la información era falsa, agregaron que era “carente del menor rigor periodístico”. Para la institución, Ricardo Raphael es un vocero o un escribiente, nunca periodista, quien lejos de dar información verdadera, replica “infundios que deshonran la credibilidad de sus medios y escritos”. 

El resto del comunicado es un conjunto de herramientas argumentativas que parecen extraídas del manual de comunicación del aparato institucional del Poder Ejecutivo: el contraste con la oscura época anterior al “gobierno de la transformación”, la sospecha no probada de que el interlocutor tiene una agenda de “intereses creados”, la afirmación de que ante hechos iguales o peores en el pasado no había denuncias, así como el cuestionamiento de la integridad de quien escribe. 

Aunado a lo anterior, el comunicado busca dar respuesta a los cuestionamientos de Raphael únicamente con tres datos: 1) una beca de doctorado para estudios en el extranjero asciende a $436,249 anuales, el doble de una beca nacional de doctorado según el comunicado, 2) que en 2023 se destinaron recursos para que 1,751 personas con becas cursaran programas de posgrado en el extranjero, y 3) que ni en la Ley General en materia de humanidades, ciencias, tecnologías en innovación, ni en el Reglamento de Becas se usan los verbos “eliminar” o “cortar”. Finalmente, sin mencionarlo de manera clara, se hace referencia al trabajo del Conahcyt en la asignación universal de becas nacionales a estudiantes de instituciones de educación superior (IES), con lo que se da a entender que se prioriza a los programas nacionales. 

Es difícil entender la forma en que alguno de estos datos responde directamente a lo descrito por Raphael en su columna. Además, el número referido por el columnista es el que las autoridades del Conahcyt compartieron, de acuerdo con un comunicado de personas postulantes a Beca al Extranjero para Doctorados en Ciencias y Humanidades 2023. El comunicado no parece dar respuesta más allá de estos datos aislados sobre este año y una plétora de consignas que hemos escuchado todas las mañanas en la conferencia presidencial. 

Es por eso que en este texto utilizo el Padrón de Beneficiarios del programa S190 Becas de Posgrado y Apoyos a la Calidad en su modalidad de Becas al Extranjero de 2012 a 2023, disponible en la página del Conahcyt, para poder encontrar algunas respuestas. Como se verá más adelante, la evidencia respalda la disminución de becas, aunque no podemos descontar que la realidad sea todavía peor. La periodista Regina López Puerta recolectó evidencia de que el comunicado 432 es falso. Con información de la Cuenta Pública y los llamados Informes Generales de Estado de la Ciencia del Sistema Integrado de Información sobre Investigación Científica y Tecnológica (Siicyt), López argumenta que no sólo hubo recorte en las becas, sino que los rubros destinados a ellas ni siquiera se gastaron.

El número de beneficiarios se ha reducido en el tiempo

La reducción en el número de personas beneficiadas con becas para estudiar en el extranjero comenzó antes de este gobierno. De 2015 a 2023 el número de personas beneficiarias de becas al extranjero ha ido en caída. De 2012 a 2015 hubo un aumento al pasar de 4,695 personas a 7,507 respectivamente. No obstante, a partir de 2015 comenzó un decrecimiento que no ha cesado. 

En 2018 había 5,422 personas becarias. Durante el primer año de gobierno, la cifra bajó a 3,707. En 2020 siguió cayendo a 3,707. En 2021 hubo 2,803 beneficiarios, mientras que en 2022 fueron 2,480 los estudiantes que tuvieron una beca Conahcyt. Para 2023 las becas llegaron al mínimo histórico: 1,780 personas beneficiarias (un número cercano al que se reportó en el comunicado 432), que implica una reducción de 67% si se le compara con respecto a 2018 y de 76% si se compara con 2015.

La figura 1 desagrega esta tendencia por nivel educativo. Es posible observar que los efectos más notables de esta caída es a nivel maestría, al pasar de 2,157 en 2012 a su punto más alto en 2015, con 4,166 y caer hasta sólo registrar 334 en 2023, una caída de 85%. A nivel doctorado, la caída ha sido ligeramente menos pronunciada: en 2012 había 2,524 personas beneficiarias, en 2015 esta cantidad pasó a ser 3,250 y para 2023 la cifra se redujo a 1,010 personas, una disminución de 69%.

Figura 1. Personas beneficiarias de becas de Conahcyt en el extranjero, 2012-2023.

El único nivel que ha presentado aumentos significativos es el de “Especialidad”, incentivado por los programas dirigidos a personal de salud y personas trabajadoras del ISSSTE principalmente. Este nivel educativo tuvo 14 personas beneficiarias en 2012, casi 90 en 2015 y, finalmente, registra 436 personas en 2023, superando a las que cursan una maestría. Finalmente, es importante señalar que  algunos programas son considerados como “Licenciaturas” por el padrón de 2022, aunque en su título lleven la palabra “Máster”, así como financiamiento para 4 participantes de “Concursos Internacionales de Evaluación de Suelos” etiquetadas como “S/D” y algunas estancias técnicas derivadas de intercambios con Japón.

La H del Conahcyt es muda: las humanidades no les importan

Si dividimos esta tendencia de acuerdo con las áreas de especialidad, el número de personas beneficiarias se ha reducido en todas con una excepción: medicina y ciencias de la salud. Esta última área pasó de tener 414 personas beneficiarias en 2020 a 779, su número más alto, en 2022 y finalmente 680 en 2023.

En la figura 2 es posible notar la caída de todas las demás áreas del conocimiento en términos de personas beneficiarias. Las Ciencias Sociales pasaron de tener 2,043 personas beneficiarias en 2015 a sólo 147 en 2023, una reducción de 97%. Las Ingenierías disminuyeron de 2,183 a 288 en el mismo periodo de tiempo, una caída de 87%. Es de notar también el caso de Humanidades y Ciencias de la Conducta, que registraron 811 personas beneficiarias en 2015 y 270 en 2023 (67% menos), pese a que precisamente una de las grandes reformas del llamado “gobierno de la transformación” fue añadirle una H, sigla referente a “Humanidades”, en el acrónimo del Conahcyt. Esa H muda ha resultado también poco visible en el presupuesto. 

Figura 2. Personas beneficiarias de becas de Conahcyt en el extranjero, por área de conocimiento, 2012-2023.

Habana Blues

De 2012 a 2020, los 10 países receptores de becarias y becarios permaneció prácticamente igual: Estados Unidos, Reino Unido, España y Alemania eran los países que recibían a más personas. No obstante, en 2021 este orden empezó a cambiar y Cuba apareció repentinamente como el principal socio educativo de México. La figura 3 retrata este cambio en particular.

De no figurar entre los primeros 10 países en 2020, Cuba apareció en el séptimo lugar en 2021 y subió hasta el tercero en 2022. Para 2023, Cuba ya se había convertido en el país que recibe a más becarias y becarios de este programa, superando a Estados Unidos, España y Reino Unido. Este año se convirtió en el principal destino de estudiantes mexicanos como política de Estado, con 430 beneficiarios en la isla. Aunque Estados Unidos y Reino Unido usualmente se habían mantenido en los primeros lugares, en buena medida por las instituciones educativas de excelencia que caracterizan a estos países, también en ellos ha disminuido drásticamente el número de personas beneficiarias. El primero pasó de tener 1,766 personas en 2015 a 307 en 2023. El Reino Unido pasó de 2,057 a 297 en el mismo periodo de tiempo. 

Figura 3. Países receptores de personas beneficiarias de becas de Conahcyt en el extranjero, 2012-2023.

El fin de la depredación

De acuerdo con el comunicado 432, el cambio institucional en el Conahcyt eliminó, gracias a la publicación de criterios claramente definidos, “aquellas prácticas rapaces que antes llevaban a la asignación de becas incluso en instituciones depredadoras, de cuestionable calidad académica, que veían en nuestros estudiantes a clientes atractivos con cargo al erario”. Dicho esto, es crucial entender qué instituciones recibían las becas y así tratar de dimensionar el fenómeno que propone esta comunicación oficial.

Es posible notar en la figura 4 los cambios de las 20 principales instituciones receptoras de becarias y becarios desde 2018 a 2023. Elegí este espacio temporal para comparar las últimas instituciones que recibieron a estudiantes antes de la “profunda transformación” liderada por Álvarez-Buylla. De hecho, de 2012 a 2018 la mayoría de las universidades permaneció con cambios poco importantes en términos de su recepción de personas becarias.

En 2023, consistente con el principal socio educativo del Conahcyt, la institución que más personas beneficiarias recibió fue la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos S.A. De acuerdo con la institución, esto se debe a que la convocatoria para becas Conahcyt para especialidades médicas en Cuba se dio a través de esta empresa. Adicionalmente, en 2023 figuraron entre las principales 20 instituciones la Universidad de la Habana, la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, el Ministerio de Salud Pública de Cuba, y el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas de Cuba.

Figura 4. Imagen de la página oficial de Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos, principal institución receptora de becarios Conahcyt en el extranjero. 

En segundo lugar, en 2023 se encuentran los sistemas de la Universidad de Texas y la Universidad de California, seguidos de la universidad McGill en Canadá, la Universidad de Leeds en Reino Unido y la Universidad de Groninga en Países Bajos. En contraste, instituciones como la Universidad Politécnica de Cataluña, la Universidad de Chicago, la Universidad Harvard, la Universidad de Manchester o la Universidad de Bristol desaparecieron del ranking.

Es también importante mencionar dos casos particulares en 2021 y 2022. Sólo en estos años figuró la Organización Iberoamericana de Seguridad Social en España como una de las principales instituciones, particularmente por becas para trabajadoras y trabajadores del ISSSTE.

Figura 5. Instituciones receptores de personas beneficiarias de becas de Conahcyt en el extranjero, 2012-2023.

La salud de los programas

Finalmente, quise saber cuáles eran los programas a los que se habían ido las becas restantes. Parece ser que parte de la transformación institucional también tuvo un impacto en los programas prioritarios. De 2018 a 2023 sólo el programa de Química se ha mantenido en los primeros 10 lugares. Un ejemplo llamativo son las Maestrías en Administración de Negocios, que fueron el principal programa durante mucho tiempo hasta desaparecer del top en 2022.

Este hallazgo es consistente con la preeminencia de los programas médicos en instituciones cubanas. Dicho patrón parece indicar que los únicos programas sobrevivientes son aquellos dedicados a la especialización médica en Cuba, probablemente motivada por las necesidades a partir de la pandemia de COVID de finales de 2019.

Figura 6. Programas de estudios con más personas beneficiarias de becas de Conahcyt en el extranjero, 2018-2023. 

Mentir poco, mentir mucho

El comunicado 432 de Conahcyt es muy contundente en términos de sus adjetivos. Su mensaje es tan claro como su estridencia, muy distante de lo que se esperaría para una comunicación gubernamental. No obstante, de fondo no responde de manera completa a las afirmación del periodista Ricardo Raphael. Del análisis de los padrones publicados por la propia institución es posible observar que claramente hay una reducción en el número de personas beneficiarias de becas. Hay, además, una especial concentración en el área de salud enfocada en Cuba. 

Este análisis no puede dar respuesta a muchas de las críticas a la política pública en materia de becas. No podemos saber, por ejemplo, si es una política regresiva en tanto que se enfoca en personas que cuentan con el capital cultural y económico como para poder ingresar a universidades extranjeras. Tampoco si quienes reciben este apoyo regresan o no a México, entre otras dudas relevantes para analizar los efectos de estos cambios de prioridades. Lo único que se confirma es la confianza de la máxima autoridad en términos de política de ciencia y tecnología en el país para comunicar sus decisiones públicas con mensajes ambiguos o abiertamente falsos.  


Manuel Toral 

Politólogo e internacionalista por el #YoDefiendoalCIDE y maestro en política pública por la Universidad de Chicago, gracias a una beca Conacyt. 

El código para reproducir los análisis y las visualizaciones se encuentra en el siguiente enlace.

LEE MÁS SOBRE: Desarmar la corrupción