El gobierno de México instaló en puntos fronterizos equipos de escaneo y vigilancia de una empresa ligada al gobierno de China, a pesar de advertencias de autoridades estadounidenses de una potencial amenaza a la seguridad nacional y antecedentes de corrupción de la compañía proveedora.

Un informe de inteligencia enviado el pasado 22 de abril por el Departamento de Estado a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), advirtió que la compañía Nuctech, fabricante de los equipos de escaneo y vigilancia fronteriza, tenía nexos con el gobierno chino.

“Evaluamos que es muy probable que Nuctech tenga una estrecha y duradera relación con el gobierno chino para promover los intereses comerciales de Nuctech y desarrollar sistemas de escaneo y detección en nombre del gobierno chino”, se advierte en los puntos claves del informe confidencial.

“Nuctech ha participado y probablemente continuará incurriendo en prácticas comerciales ilegales que incluyen corrupción, soborno y dumping para obtener una ventaja injusta en el mercado”, se lee en el documento, que como antecedente citó anteriores prácticas corruptas en países de África, Asia y Europa.

“Los sistemas de escaneo y detección de Nuctech tienen deficiencias en capacidades de detección, lo que podría crear oportunidades de explotación por parte del gobierno chino”, refiere el informe de contrainteligencia.  

Diez días después de esta alerta, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, envió una carta al canciller Marcelo Ebrard, en el que expresó “la creciente preocupación” del gobierno estadounidense por la adquisición de los equipos chinos.

En la carta, fechada el 2 de mayo, Salazar advirtió al gobierno de López Obrador sobre los posibles riesgos para la relación bilateral que podría traer la compra de equipo de escaneo y seguridad proveniente de China, para la detección de drogas y armas, en puertos marítimos, el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA) y en la refinería de Dos Bocas.

“Me gustaría comunicar nuestra creciente preocupación por los recientes anuncios por parte del Gobierno de México en cuanto a sus planes de adquirir equipo de escaneo y seguridad de ciertas entidades estatales chinas (RPC) para el uso de funcionarios de la Agencia Nacional de Aduanas, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de la Marina”, refiere la misiva de Salazar. “Ningún equipo de escaneo chino cumplió con los estándares de control de calidad de los Estados Unidos”.

En su carta, el Embajador exhortó al canciller mexicano: “lo alentamos a salvaguardar la propia seguridad de México y preservar las ganancias potenciales del intercambio de información bilateral para mejorar la administración fronteriza mediante la adquisición de equipos de seguridad de proveedores probados y confiables”.

Aunque el embajador no menciona en la misiva el nombre de la compañía china con la que el gobierno de México concretaría las adquisiciones de equipos, documentos y comunicaciones que se desprenden del hackeo a la Sedena del colectivo Guacamaya revelan que desde el 22 de abril el gobierno estadounidense había alertado al de México sobre las amenazas de los sistemas de escaneo y detección de la empresa Nuctech y su relación con el Gobierno de China.

Un informe confidencial de la Oficina de Inteligencia y Análisis del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, enviado en esa fecha por el coordinador de Seguridad Fronteriza de la Embajada en México, Francisco Lage, alertó de la cercana relación de la empresa Nuctech con el gobierno chino, así como de las deficiencias en sus sistemas de detección, prácticas comerciales ilegales y desleales, y preocupaciones sobre la privacidad individual. 

El reporte dirigido a la Oficina de Enlace de la Sedena con el Departamento de Defensa de EU, y remitido también al Centro Coordinador de Aduanas, advirtió además que los sistemas de escaneo y detección de Nuctech relacionados con el Covid-19 podrían representar una amenaza a la privacidad individual debido a la tecnología de reconocimiento facial que emplea. 

EQUIPO DE NUCTECH, OPERANDO EN ADUANAS

Oficios internos de la Agencia Nacional de Aduanas muestran que en abril de este año se realizó la asignación y traslado de equipos de rastreo de la empresa Nuctech a distintas aduanas del país como las ubicadas en la frontera norte, como Ciudad Juárez, Nogales, Tijuana y Sonoyta, en Sonora, así como en el cruce fronterizo sur con Belice, y en los puertos de Cancún, Veracruz, Manzanillo Altamira y Guaymas.

Otros documentos de Aduanas dan cuenta del uso de dicho equipamiento de escaneo de Nuctech operando desde octubre de 2021 en aduanas, como las de Matamoros, Tijuana, Nuevo Laredo y Puerto Palomas. 

Por ejemplo, un parte de novedades de la aduana de Matamoros del 31 de agosto del presente año, menciona que un vehículo de rayos X de Nuctech está pendiente de recibirse en ese recinto, mientras que se cuenta con cinco equipos de rayos X de Rapiscan fuera de operación. 

La misma situación se reportó en el mismo mes en la aduana de Tijuana, donde existen cinco en operación de Nuctech y tres equipos de Rapiscan en desuso. Esta última marca había sido sugerida por el embajador Ken Salazar como uno de los tres proveedores confiables de los Estados Unidos. 

Pese a que estas comunicaciones confirman el uso de los equipos de Nuctech por parte del gobierno mexicano, las autoridades mantienen reservados los contratos asignados a esa empresa china o a su representante en México, según constató MCCI en un rastreo realizado en plataformas de transparencia, como la PNT y Compranet.

Fichas técnicas y propuestas económicas enviadas por Nuctech y una propuesta económica para el sistema de monitoreo de equipaje, dirigidas a correos de la Sedena en mayo y junio de 2020, revelan que las máquinas de inspección de Nuctech también fueron consideradas para el equipamiento del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).

Incluso, un documento de agosto del presente año menciona que Nuctech adeudaba 103 mil pesos a la Sedena por el hospedaje de 22 personas -9 de ellos de origen chino- en el hotel del AIFA.

LOS ANTECEDENTES DE CORRUPCIÓN DE NUCTECH 

En el informe de inteligencia del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, enviado al gobierno de México en abril de este año, se advierte que Nuctech se ha visto involucrada en casos de corrupción en Europa, Asia y África.

En 2009, la Comisión Anticorrupción de Namibia acusó a un ejecutivo de Nuctech y a un funcionario público del Ministerio de Finanzas de fraude, corrupción y lavado de dinero por un acuerdo ilegal para la compra de escáneres de rayos X. 

Las autoridades estadounidenses mencionan en el informe que el acuerdo para adquirir estos escáneres se produjo después de que el expresidente chino, Hu Jintao, ofreciera un préstamo para cubrir la mayor parte de los costos, siempre y cuando se adjudicara el contrato a una empresa china. 

En su momento, el caso atrajo atención internacional debido a que en ese momento Nuctech era dirigida por Hu Haifenf, hijo del entonces presidente Hu Jintao. De acuerdo con una nota de la agencia Reuters, la Comisión Anticorrupción citó a comparecer por este caso a Hu Haifenf.

Mientras que en Taiwán, en un juicio realizado en 2020, las autoridades de ese país encontraron que una representante de ventas de Nuctech dio sobornos y mantuvo relaciones sexuales con un alto mando de la Policía de Aviación a cambio de obtener información sobre el proceso de adquisición de escáneres de rayos X. 

El reporte de inteligencia cita, además, un artículo de investigación académica que menciona que Nuctech tomó represalias por acusaciones realizadas en 2009 por su principal competidor europeo.

EL VÍNCULO CON EL GOBIERNO CHINO

En el reporte de inteligencia enviado a la Sedena, las autoridades estadounidenses mencionan que Nuctech fue fundada en 1997 y fue dirigida por un hijo del ex presidente chino Hu Jintao.

“Evaluamos que es muy probable que Nuctech tenga una relación estrecha y duradera con el gobierno chino para promover sus intereses comerciales y desarrollar sistemas de detección y detección en nombre del gobierno chino”, se lee en el informe, en el cual se advierte: “El gobierno chino puede utilizar las leyes de seguridad nacional chinas aprobadas en 2014, 2015 y 2017 para obligar a las empresas chinas a cooperar y ayudar en asuntos de inteligencia y seguridad nacional”.

Además de la relación familiar entre directivos de Nuctech y funcionarios del gobierno chino, el reporte menciona otros vínculos.

Nuctech y la Universidad de Tsinghua construyeron en conjunto el laboratorio nacional de ingeniería de China para detección de explosivos en 2017. Según el informe de contrainteligencia del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, dicha universidad ha asumido la tarea de desarrollar tecnologías de detección como las que vende Nuctech en México. 

Además, en abril del año pasado Nuctech transfirió la mayoría de sus acciones a la Corporación Nuclear de China, un conglomerado industrial controlado por el estado y que históricamente ha estado vinculado con las capacidades nucleares del ejército chino. 

Con información de Iván Alamillo, Verónica Ayala y Raúl Olmos